Portugal es todo un secreto. Esconde tantas maravillas que podríamos dedicarle un post a cada uno de sus rincones. Es por eso que hemos tenido que dividir la ruta portuguesa entre la región sur del Algarve (ver Ruta portuguesa Vol I) y esta entrada que la dedicaremos al centro y norte del país en el que las protagonistas serán Lisboa y Oporto.
Nuestra ruta comienza con la región de Alentejo, sinónimo de aventura. Se encuentra a medio camino entre la sierra y el mar lo cual la convierte en el lugar perfecto para hacer senderismo, pasear en bici, observar las poco conocidas especies de aves que habitan allí o ya si queremos un poco más de riesgo, volar en globo (desde Cabeço de Vide hasta Évora) o saltar en paracaídas. Para darnos un chapuzón nos acercaremos a la costa, a la pequeña pero encantadora ciudad de Sines, y desde allí podremos acceder a las mejores playas de toda la región: el pintoresco pueblo de Porto Covo, la playa de Sao Torpes, Playa de la Isla de Pessegueiros, playa de Buzios o la playa naturalista Do Salto perfectas para descansar o aprovechar las mejores olas con nuestra tabla de surf.
A finales de julio se celebra en Sines, uno de los mejores festivales de jazz y blues del país; el Festival de Músicas Do Mundo, un evento que sin duda no nos podemos perder (más información aquí).
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| Playa Isla de Pesseguiro. Pinterest |
Seguimos con nuestra caravana por el litoral hasta Setúbal, una ciudad situada en la desembocadura del río Sado con un gran patrimonio histórico y cultural. Aquí podremos disfrutar del mejor vino moscatel acompañado de una tapita de queso de la zona. En cuanto a la playas destacamos: Figueirinha, Galapos y el Portinho da Arrábida. A unos 20 kms tenemos la ciudad de Sesimbra, muy turística y concurrida por sus preciosas playas, buen clima y gran ambiente nocturno. No podemos pasar de largo sin visitar la Fortaleza de Santiago o el Castelo. Para los amantes del rock tenemos el gran Festival Super Bock Super Rock en la aldea de Meco, a escasos kilómetros de la ciudad. Si os animáis a apuntaros, tenéis más información en la sección "extras".
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| Vistas desde el Castillo de Sesimbra. |
Próxima parada: la gran Lisboa. Buff... ¿por dónde empezamos? Lisboa es una verdadera joya, tiene tanto qué ver que es imposible de explicar en unas cuantas líneas. Empezando por sus monumentos históricos (Castillo de San Jorge, la Catedral, el elevador de Santa Justa, el monumento a los Descubrimientos, el Monasterio de los Jerónimos o la Plaza del Comercio), sus barrios bohemio y ambientados (Barrio Alto y Chiado), ese paseo en tranvía (la famosa línea 28 hace un recorrido por las calles más antiguas por tan solo un par de eurillos) o ese fado paseando por el barrio de Alfama (el mejor bar para escuchar un fado es Senhor Vinho), describen a la perfección la típica foto de la ciudad. Pero Lisboa es mucho más, es luz, sol, mar, buen ambiente, buena comida... en definitiva el paraíso.
Comer bien, o pegarnos una buena fiesta es fácil sobre todo en verano, pero tendremos que callejear un poco y salirnos de las zonas más turísticas si no queremos que nos dé un patatús cuando haya que pagar la cuenta (es carísimo). Además en verano se celebran los mejores eventos del país: el Rock in Río, el Optimus Alive y las encantadoras fiestas de San Antonio. En el apartado "extras" podréis obtener más información.
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| Lisboa, Portugal. |
Visita obligatoria merecen Cascais, Estoril y Sintra. Son ciudades alejadas apenas a unos kilómetro de la capital portuguesa de las que no podemos pasar. El Conjunto de Cascais y Estoril , en la costa, es una de las zonas más cosmopolitas, destacamos la Playa da Poça, Boca do Inferno, Playa de las Moitas, o la Playa de la Duquesa. En cambio Sintra es como un cuento de hadas, un pequeño pueblo en medio de una colina repleto de coloridos palacios y castillos que sirvieron de inspiración a los románticos del siglo XIX. Sin duda un lugar muy curioso.
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| Quinta da Regaleira, Sintra. |
Nuestra última parada será Porto, pero de camino podemos aprovechar para conocer algunos rincones como las 27 Aldeas de Esquisto (su nombre se debe al material de los tejados de las casa de estos pueblos escondidos en el Sierra de la Estrela), la ambientada ciudad universitaria de Coimbra con una larga historia y patrimonio, o las preciosas playas de Figueira da Foz, donde podemos ponernos las botas con una buena mariscada en algún chiringuito.
Porto, situada en la desembocadura del Duero, Patrimonio Mundial, y ciudad del vino, es como estar dentro de una película. Andar por sus estrechas y decadentes calles te envuelve en un ambiente de nostalgia y romanticismo. No podemos irnos sin visitar la Estación de San Bento, el Mercado Bolhao, la Ribeira, la Catedral de la Se de Oporto, o al otro lado del río, la ciudad de Vila Nova de Gaia cuna de las más prestigiosas bodegas portuguesas (aquí se celebra el festival de música alternativa Mares Vivas).
Porto en verano se llena de actividades y eventos: en la Casa de la Música suele haber conciertos, a principios de junio tenemos el Optimus Primavera Sound o con suerte pillamos la Noche de San Juan el 23 de Junio.
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| Ribeira, Porto. |
Como dato curioso, en pleno centro se encuentra una de las librerías más bonitas de Europa que ha sido escenario de algunas películas de Harry Potter: Librería Lello e Irmao.
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